Alguna vez conocida por el muro que la dividía, la ciudad de Berlín es ahora una ciudad vanguardista y cosmopolita, con una arquitectura reconocida a nivel mundial, un gran número de museos e importantes festivales.
Escápate de la ciudad y refúgiate en uno de los parques urbanos más grandes del mundo, con lagos y praderas, además de cervecerías al aire libre y una variedad de interesantes reliquias.
El que fuera una vez un punto de tensión y de dramáticos intentos de escape es hoy una reliquia de la Guerra Fría que se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de Berlín.
El primer zoológico sin jaulas del mundo tiene animales, un acuario y un parque con veredas. Ve a las aves volar libremente y a los pingüinos en su hábitat natural.
El primer zoológico sin jaulas del mundo tiene animales, un acuario y un parque con veredas. Ve a las aves volar libremente y a los pingüinos en su hábitat natural.
El primer zoológico sin jaulas del mundo tiene animales, un acuario y un parque con veredas. Ve a las aves volar libremente y a los pingüinos en su hábitat natural.
Este museo de historia natural de tres pisos tiene una de las mayores colecciones en Europa de fósiles de dinosaurios, así como de especimenes de animales y rocas.
El que fuera una vez un punto de tensión y de dramáticos intentos de escape es hoy una reliquia de la Guerra Fría que se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de Berlín.
El que fuera una vez un punto de tensión y de dramáticos intentos de escape es hoy una reliquia de la Guerra Fría que se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de Berlín.
Hacer un recorrido a través del arte y la cultura de casi 6,000 años de civilización es tan fácil como visitar esta isla declarada patrimonio de la humanidad.
Hacer un recorrido a través del arte y la cultura de casi 6,000 años de civilización es tan fácil como visitar esta isla declarada patrimonio de la humanidad.
El que fuera una vez un punto de tensión y de dramáticos intentos de escape es hoy una reliquia de la Guerra Fría que se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de Berlín.