Fotos de Animal, Arquitectura moderna, Faro + Museo en Asia

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Siente la energía de una de las ciudades más grandes del planeta, hogar de tiendas de electrónica e inmensos rascacielos, arte antiguo y bellas flores de cerezo.

Visita esta pequeña ciudad-estado y disfruta de sus atracciones culturales, grandes edificios, amplios centros comerciales y deliciosa comida callejera.

La tercera ciudad más grande de Corea es una fascinante combinación de historia política, centros comerciales y zonas de entretenimiento modernas, e islas periféricas. .

Asahikawa es el centro de la destilación de sake y de los fideos ramen con mariscos de Japón. Diviértete en el zoológico, el museo de esculturas, la aldea de la cerámica, las pistas de ski y los maravillosos jardines.

La capital de Indonesia es una concurrida metrópolis, famosa por sus reliquias coloniales, bellas mezquitas, numerosas tiendas y su entretenimiento familiar.

La metrópolis sudcoreana cuenta con algunos de los mercados y distritos nocturnos más concurridos de Asia, además de tranquilas casas de té y palacios con jardines.

Ingresa en una selva con abundante vegetación, con múltiples higueras de bengala y arroyos, para visitar templos y baños hindúes ancestrales, y ver a los ágiles macacos trepar entre las copas de los árboles.

Este extravagante sitio de descanso con jardines, ubicado en lo alto de una colina, fue tiempo atrás la residencia del “Dalí de Bali”, el hombre considerado por muchos como uno de los artistas más excéntricos de la isla.

Aventura, relajación y paisajes deslumbrantes te esperan en este archipiélago tropical, que cuenta con playas tranquilas, selvas frondosas y misteriosos monumentos antiguos.

Este extravagante sitio de descanso con jardines, ubicado en lo alto de una colina, fue tiempo atrás la residencia del “Dalí de Bali”, el hombre considerado por muchos como uno de los artistas más excéntricos de la isla.

Ingresa en una selva con abundante vegetación, con múltiples higueras de bengala y arroyos, para visitar templos y baños hindúes ancestrales, y ver a los ágiles macacos trepar entre las copas de los árboles.