El Ángel de la Independencia de la Ciudad de México es un tributo a los héroes de la guerra de independencia de México contra España. Desde 1521, cuando Hernán Cortés venció a la nación azteca, hasta principios del siglo XIX, el gran país de México era una colonia española, separada de sus colonizadores por el océano Atlántico. Aprende acerca de la batalla que comenzó en 1810, duró una década, y, finalmente, llevó a que México fuera, primero, una monarquía independiente y, luego, una república.
En 1902, casi un siglo después del inicio formal de la batalla por la independencia, el presidente Porfirio Díaz inició la construcción del monumento con el arquitecto Antonio Rivas Mercado. El monumento se inauguró en 1910 para conmemorar el centenario de la independencia de México en medio de desfiles y fuegos artificiales. Ahora más de 100 años después, observa este ícono que representa la duradera presencia política y económica de México en la comunidad global.
El monumento consta de un zócalo o pedestal circular, coronado por una base cúbica con cuatro estatuas de Enrique Alciati que representan la Justicia, el Derecho, la Paz y la Guerra. Debajo de la base de la estatua hay un mausoleo que contiene los restos de una docena de héroes de la guerra de independencia. Una alta columna corintia se eleva desde la base, y la diosa griega Niké o Victoria alada se erige encima de la columna a más de 35 metros (115 ft) por encima de la calle. El terremoto de 1957, que hizo que Niké se cayera de la columna, no pudo destruir este importante símbolo, y la estatua pudo restaurarse rápidamente. Observa la estatua en la noche cuando la piedra chiluca de la columna tiene un resplandor brillante en colores de temporada, y la Niké dorada parece lista para emprender el vuelo.
Camina por el Paseo de la Reforma para encontrar el monumento Ángel de la Independencia en el centro histórico de la Ciudad de México. Participa de encuentros que se realizan aquí para celebrar Año Nuevo o las victorias del equipo de futbol de México. Sé testigo de concentraciones políticas y protestas que a veces ocurren cerca del monumento. Además, los domingos, el paseo arbolado está cerrado al tránsito, por lo que caminar por aquí es particularmente agradable. Visita los centros culturales en el Bosque de Chapultepec y observa otras fuentes y estatuas a lo largo de la ancha calle mientras reflexionas sobre la historia de México.
