La Alameda Central es un antiguo parque que toma su nombre de los álamos que fueron plantados aquí para brindar un espacio verde de recreación a los residentes de la Ciudad de México. Pasea por los senderos, ahora bordeados de fresnos y sauces, para apreciar la calma de este refugio en el corazón de la ciudad.
Viaja al siglo XVI, cuando el Virrey Luis de Velasco tuvo la iniciativa de crear un lugar de recreación y tranquilidad bajo la sombra de los árboles. A pesar de este plan, a lo largo de los siglos el parque fue utilizado con diferentes propósitos antes de volver a su objetivo inicial. Después del mandato de Velasco, el gran espacio verde se convirtió en un área de pastura para los caballos de la zona. Se levantaron paredes para cerrar el parque. Durante la época de la Inquisición, los enemigos del régimen fueron condenados a muerte en la Plaza San Diego del parque.
En el siglo XVIII, Felipe V ordenó la construcción de varias fuentes e hizo otros cambios inspirados en los jardines de Versalles. El Virrey Carlos Francisco de la Croix amplió los límites del parque, transformando el cuadrado en un rectángulo de tamaño mayor. En la actualidad, podrás dar un romántico paseo por la Alameda Central con tu pareja como lo hacían los enamorados de antaño con la supervisión de los padres.
Cuando Carlota Amalia se convirtió en emperadora de México, el parque estuvo bajo influencia belga. Echa un vistazo al jardín de rosas que mandó a construir y la fuente esculpida de Mathurin Moreau, Venus conducida por céfiros, que donó al parque. Poco después, las paredes fueron derribadas y se agregaron luces para reducir las posibilidades de crímenes en el parque.
Cuando la Alameda Central se convirtió nuevamente en un popular lugar de paseo para los residentes, Porfirio Díaz construyó el Palacio de Bellas Artes y el Hemiciclo a Juárez dentro del parque. También volvieron los conciertos de música de los domingos que había instaurado el Virrey Bucareli. Haz que tu visita coincida con un concierto para disfrutar de esta tradición.
En la Ciudad de México, la Alameda Central es uno de los mejores lugares para relajarse y encontrarse con residentes locales de todos los ámbitos de la sociedad. Para llegar al parque ubicado en el centro histórico de la ciudad, viaja en metro hasta las estaciones Hidalgo, Juárez o Bellas Artes.