Hernán Cortés, quien estuvo a cargo de la colonización española del continente, colocó la primera piedra de la Catedral Metropolitana en 1524. Admira los detalles renacentistas, barrocos y neoclásicos de esta enorme maravilla de la arquitectura que fue construida a lo largo de un período de 300 años.
En sus inicios, el templo fue construido con piedras del Templo Mayor de Tenochtitlán, una ciudad antigua que Cortés arrasó en su conquista de los aztecas. En 1547, este templo fue declarado catedral. Más adelante en el mismo siglo, el edificio fue demolido y comenzó la construcción de una nueva catedral en el mismo sitio, simbólicamente situada sobre la Pirámide Azteca del Sol. Visita el lugar en la actualidad para admirar esta histórica estructura religiosa y sus fantásticas obras de arte. Los trabajos de restauración de las últimas décadas lograron estabilizar el hundimiento que experimentó la catedral desde sus orígenes.
Aunque el interior de la catedral se terminó primero y el edificio fue inaugurado en 1667, el exterior no estuvo completo hasta 1813. El arquitecto Manuel Tolsá diseñó las fachadas y los campanarios. Levanta la mirada para ver la cúpula en el transepto y las esculturas de la Esperanza, la Fe y la Caridad.
Haz un recorrido por el interior de la iglesia, el cual tiene el diseño de una cruz latina. Echa un vistazo al coro y las 14 capillas, además de los altares principales, los dos grandes órganos y el mobiliario original. Algunos de los muebles que podrás ver son las sillas del coro provenientes de Macao y un atril de las Filipinas, ambas colonias del Imperio Español cuando se construyó la iglesia. Presta atención a los murales de la sacristía pintados por Juan Correa y Cristóbal de Villalpando.
El arquitecto Guillermo de Balbás creó la Capilla Real detrás del altar principal, el Altar de los Reyes. Entre las columnas barrocas doradas podrás ver pinturas de reyes y reinas que se convirtieron en santos. En la nave central, observa el trabajo de forja del Altar del Perdón, donde se encuentra el Cristo del Veneno.
La Catedral Metropolitana se encuentra frente a la Plaza de la Constitución o Zócalo en el centro histórico de la Ciudad de México. Toma el metro hasta la estación Zócalo. Visita la catedral sin cargo cualquier día, desde la mañana hasta la noche. Consulta para saber si puedes subir al campanario o si habrá algún recital de coro o concierto durante tu visita. Desde la plaza podrás ver el Palacio Nacional, el ayuntamiento y muchas tiendas de antigüedades detrás de las arcadas.