Durante casi 200 años, este promontorio rocoso ha sido el hogar del faro de Santander, donde ahora hay una galería de arte, una cafetería y varios monumentos a la historia de la zona.
Conoce en profundidad el pasado marítimo de la ciudad y aprende sobre los viajes de Cristóbal Colón durante una visita a esta estructura defensiva de 800 años de antigüedad.