Contempla las espectaculares vistas de Seattle mientras te elevas sobre el estrecho de Puget en una de las ruedas de la fortuna más altas de Norteamérica.
El punto más al noroeste de los Estados Unidos continentales tiene una belleza impactante, con espectaculares cabos rocosos y una vista inolvidable del océano.
El monte Rainier, tan grande que por sus dimensiones se creó un parque nacional en su honor, tiene un robusto cono volcánico cubierto de nieve que puede verse claramente desde Seattle.
El monte Rainier, tan grande que por sus dimensiones se creó un parque nacional en su honor, tiene un robusto cono volcánico cubierto de nieve que puede verse claramente desde Seattle.
Esta cresta montañosa es el paraíso de los aventureros, con kilómetros de senderos y lugares para snowboarding situados entre lagos, valles y prados subalpinos.
El monte Rainier, tan grande que por sus dimensiones se creó un parque nacional en su honor, tiene un robusto cono volcánico cubierto de nieve que puede verse claramente desde Seattle.
Esta cresta montañosa es el paraíso de los aventureros, con kilómetros de senderos y lugares para snowboarding situados entre lagos, valles y prados subalpinos.
Aislada y virgen, esta remota arista de la península Olímpica es famosa entre quienes gustan de la pesca, la observación de aves y los paseos por la playa.
El monte Rainier, tan grande que por sus dimensiones se creó un parque nacional en su honor, tiene un robusto cono volcánico cubierto de nieve que puede verse claramente desde Seattle.
Ven a pasear en bicicleta, kayak o a pie en esta isla ubicada en el estrecho de Puget y conoce la vida silvestre local o prueba alimentos orgánicos frescos.