Este jardín-tumba del emperador fue construido nueve años después de su muerte y es un ejemplo de la antigua arquitectura a base de arenisca roja y mármol.
La vista de este lago turquesa en el Valle de los Diez Picos ha sido inmortalizado en innumerables postales y en el dorso de los billetes de 20 dólares canadienses.
Disfruta una gran variedad de actividades al aire libre durante el verano y el invierno, y visita las capillas antiguas del hermoso valle suizo de Funes.
Visita las Montañas Rocosas canadienses para encontrar algunos de los paisajes y parques más espectaculares de Norteamérica en esta región llena de montañas, lagos, plantas y animales.
El sur de Nápoles es un área de gran belleza y una hermosa ruta costera que serpentea entre plantíos de limón, viñedos y pueblitos al borde de los acantilados.
Disfruta al máximo la escalada y el ski en las Montañas Rocosas, prueba las golosinas de miel de maple en Montreal y disfruta del arte y la cultura de los museos de Toronto y Vancouver.
Visita la capital del vino de Sudamérica para probar delicados Malbecs, estudiar la cultura argentina y disfrutar de un paisaje que no dejará de sorprenderte.
Esta impresionante catedral ubicada en la Plaza Central de Morelia, cuenta con un amplio abanico de estilos arquitectónicos y obras de arte excepcionales del siglo XVI.
El interior azul y dorado del corazón espiritual de Montreal maravilla a los visitantes y peregrinos. Fue alguna vez la casa de oración más grande de Norteamérica.
Esta montaña que emerge del centro de la ciudad es conocida principalmente como la sede de la emblemática estatua de Jesús, del tamaño propio de un rascacielos, en Río.
El monte Rainier, tan grande que por sus dimensiones se creó un parque nacional en su honor, tiene un robusto cono volcánico cubierto de nieve que puede verse claramente desde Seattle.