Este santuario del siglo XVII fue uno de los pocos edificios en Asakusa que resistió los bombardeos durante la guerra y en la actualidad es el sitio donde se realiza uno de los festivales más importantes de Tokio.
Este santuario del siglo XVII fue uno de los pocos edificios en Asakusa que resistió los bombardeos durante la guerra y en la actualidad es el sitio donde se realiza uno de los festivales más importantes de Tokio.