Con sus antiguos castillos, sus elegantes puentes y sus iglesias, la capital de la República Checa es una ciudad que parece salida de un cuento de hadas.
Camina por un bello bosque o viaja en teleférico hasta este mirador impresionante ubicado sobre Karlovy Vary. Disfruta la vista y visita las atracciones familiares ubicadas alrededor de esta torre.