Todi es un pueblo que parece salido de un cuento, pues está ubicado sobre una colina, frente a la fabulosa campiña del valle del Tíber. Es un lugar lleno de callejones angostos y escaleras que salen en todas direcciones desde las bellas plazas. El pueblo de Todi se creó originalmente como un asentamiento de la tribu de los umbros, después alcanzó un mayor desarrollo cuando lo habitaron los etruscos y más adelante estuvo bajo el control de los romanos, por lo que cuenta con importantes influencias de los estilos renacentista y barroco. Descubre la magnífica colección de iglesias, puertas, palacios y jardines públicos de este pueblo.
El centro del pueblo es una zona medieval protegida por una serie de murallas concéntricas construidas en diferentes periodos de la historia. El Primero Cerchio delle Mura, el Secondo Cerchio delle Mura y el Terzo Cerchio delle Mura (Primero, Segundo y Tercer Círculo de Murallas) están vinculados con la civilización etrusca, el periodo romano y la Edad Media, respectivamente.
Comienza tu recorrido en la Piazza del Popolo, que es la impresionante plaza central del pueblo. Siéntate en los escalones de la catedral de Todi y mira hacia el otro lado de la plaza para encontrar el Palazzo del Popolo, donde se encuentra el Museo Etrusco-Romano. Observa los restos de los túneles subterráneos en las cisternas romanas. Pasea por las calles zigzagueantes y pasa por las antiguas puertas, como la Porta AureaSe abrirá en una nueva ventana, la Porta Catena, la Porta Marzia y la Porta Prassede.
Visita las diferentes iglesias del pueblo, como el templo de San Fortunato. Afuera de las murallas del barrio antiguo, puedes ver la obra maestra del Renacimiento titulada Santa Maria della ConsolazioneSe abrirá en una nueva ventana (Santa María de la Consolación).
Disfruta un buen descanso en el Parco della Rocca, un parque lleno de árboles que ofrece una excelente vista panorámica de los paisajes llenos de vegetación que hay en los alrededores. Disfruta otra vista igual de impresionante en la Piazza Garibaldi.
Después de hacer turismo durante el día, relájate con el ambiente amigable de los bares y restaurantes del pueblo. Prueba la palomba alla ghiotta, un platillo típico de Todi que consiste en una paloma pinchada y cocida a fuego lento. Acompaña tu comida con una copa del vino blanco que se produce en la región el cual tiene aromas de flores y frutas.
Todi está en el suroeste de la provincia de Perugia. Está a unas 2 horas en auto hacia el norte de RomaSe abrirá en una nueva ventana. Los camiones públicos viajan frecuentemente desde el pueblo hacia la ciudad de PerugiaSe abrirá en una nueva ventana y viceversa. Con su gran encanto del viejo mundo, Todi es un lugar ideal para escapar de los destinos llenos de turistas en Italia.