Encumbrado en las colinas que están sobre Amalfi está Ravello, un atractivo pueblito de elegantes jardines con vistas al campo y al mar.
Conoce el pueblo, caminando por las tranquilas calles adoquinadas de Ravello. Disfruta de una bebida en uno de los cafés que rodean la Piazza Duomo, la plaza principal.
El punto focal de la plaza es la catedral de San Pantaleone. Fue fundada en 1086 y consagrada al santo patrono de Ravello. Antes de entrar a la iglesia, haz una pausa junto a la gran puerta de bronce, creada en 1179. Ésta tiene 54 paneles grabados en relieve con imágenes de Cristo y de algunos santos. El interior de la catedral tiene un púlpito de mármol, pinturas renacentistas y un pequeño recipiente que se cree contiene la sangre del santo. Baja a la cripta para ver el Museo del Duomo, el cual exhibe esculturas y objetos religiosos. El museo cobra una pequeña cuota de admisión.
Las principales atracciones de Ravello son los jardines de Villa Cimbrone y Villa Rufolo. Ambos cuentan con flores mediterráneas y exóticas, además de hermosas vistas de la bahía de Salerno. Pasea por sus terrazas y debajo de las pérgolas, y deléitate con los miles de flores del lugar.
Ravello está flanqueado por las montañas Scala, las cuales proporcionan bastantes oportunidades para excursionar. Una de las caminatas más famosas y fáciles es bajar por la antigua escalera hasta el pueblo de Minori. La caminata colina abajo toma alrededor de una hora a un paso moderado y te ofrece vistas de la Costa de Amalfi y de la bahía de Salerno. Si necesitas conocer los detalles de los itinerarios de las excursiones en Ravello, comunícate con la oficina de turismo del lugar a través de su sitio web.
Entre junio y octubre, Ravello es escenario de un festival de las artes, con música, danza y artes visuales. Mira las presentaciones en sedes por todo el pueblo.
Ravello está ubicado a siete kilómetros (cuatro millas) de Amalfi y a 30 kilómetros (18 millas) de Salerno. Puedes llegar al pueblo en coche desde la carretera costera. Las angostas e inclinadas vías de Ravello son adecuadas solo para peatones. Si vienes manejando, deberás dejar tu coche en el estacionamiento cercano a la catedral y seguir a pie. Como alternativa, un autobús SITA ofrece un servicio frecuente de Amalfi a Ravello.