Visita el Museo Fram para que conozcas a algunas de las expediciones más valientes de la historia y los barcos impulsados por vapor o velas que las hicieron posible. Súbete al Fram, la nave construida en Noruega que llevó al explorador Roald Amundsen a la Antártida, en donde descubrió el Polo Sur.
El Fram fue la nave polar de madera más fuerte alguna vez construida, la cual fue diseñada para soportar la presión del mar congelado. Entre 1893 y 1912 formó parte de tres importantes expediciones hacia ambas regiones polares. Hoy en día, ocupa el centro del museo. Alrededor del mismo, en tres niveles, encontrarás artefactos de dichos viajes.
Camina por la cubierta, párate frente al timón e imagina lo que debió ser navegar por las aguas del Ártico y de la Antártida. Dentro de la nave verás cómo las tripulaciones aguantaban el frío extremo de las regiones polares. Imagina vivir o trabajar en los camarotes, salas, bodega de carga, cocina y sala de máquinas. Observa el gramófono y el piano que habrían entretenido a los exploradores durante esos largos viajes.
Examina las muestras de instrumentos científicos, equipo personal y médico. Éstas incluyen brújulas de trineo, anemómetros y el cronómetro que Amundsen usó durante la expedición al Polo Sur. Visita Framheim, una recreación de la base de Amundsen en la Antártida.
La Caminata Oscura (Dark Walk) es la experiencia interactiva en tres salas de una expedición polar que salió mal. Párate en un barco en movimiento mientras criaturas fantásticas lo atacan y la temperatura baja a -10ºC (15ºF). Camina por el túnel de hielo, aunque cuídate del oso polar que está al asecho.El museo también cuenta con espacio de exposiciones dedicado a exploradores noruegos menos conocidos. Incluyen a Carsten Borchgrevink, quien dirigió la primera expedición invernal a tierra firme en la Antártida.
Ubicado en la península Bygdøy, puedes llegar fácilmente al museo en autobús desde el centro de Oslo. Un transbordador parte del muelle del Ayuntamiento durante los meses veraniegos.
El Museo Fram está abierto todos los días, excepto en Nochebuena y el día de Navidad. Para entrar hay que pagar una pequeña cuota de admisión.