Existen muchas escalinatas famosas en el mundo, desde la Escalera Potemkin en Odessa, Ucrania, hasta la Escalera de Selarón en Río de Janeiro, Brasil. Pocas pueden competir con lo romántica que es la escalera de la Plaza de España.
Si la comparamos con la mayoría de los destinos turísticos de Roma, la Plaza de España es relativamente nueva en la ciudad. Sin embargo, es más antigua que la Declaración de Independencia de los Estados Unidos. La plaza se llama así por la embajada española que alguna vez existió aquí.
En 1717, el arquitecto Francesco de Sanctis junto con Alessandro Specchi desarrollaron un diseño para la escalera de 138 escalones que crearía un mejor acceso hacia la iglesia de la Trinità dei Monti. Incorporaron curvas, líneas rectas, vistas y terrazas a un diseño que se mezcla con la arquitectura presente en la plaza.
Desde entonces, la escalera ha jugado un papel importante en la historia de Roma. Durante los siglos XVIII y XIX, la Plaza de España se convirtió en lugar de reunión de artistas locales, escritores, dandis y bohemios. En el siglo XX se inmortalizó en la pantalla grande con películas como El ladrón de bicicletas (1948), Vacaciones en Roma (1953) y El Talentoso Mr. Ripley (1999).
Aunque hoy está prohibido el pasatiempo predilecto de hacer picnic o comer un gelato en la escalera, la Plaza de España sigue siendo uno de los mejores lugares para socializar. Los lugareños y los turistas vienen a sentarse, conversan y disfrutan de la belleza de la ciudad.
En la parte superior de la escalera se encuentra la espectacular iglesia del siglo XVI y en la parte de abajo, la Plaza de España del siglo XVII cuenta con la obra maestra de Bernini como punto de referencia: la Fuente de la Barcaza. Recuéstate en los escalones y habla con tus amigos mientras ves el atardecer, sentirás un toque de España en un paisaje verdaderamente romano.
La Plaza de España está en el centro de Roma. Toma la línea A del metro (línea roja) hasta la estación Spagna, que está junto a la plaza. Los autobuses son demasiado grandes para caber en las angostas calles del área. Sin embargo, muchos se detienen en la Piazza del Popolo, a 10 minutos de distancia a pie.