La primera parada de su recorrido de medio día por Taipéi es el Salón Conmemorativo de Chiang Kai-shek, un impresionante monumento en memoria del fallecido presidente de la República de China, Chang Kai-shek. Para llegar a la sala, hay que subir 89 escalones, que representan la edad de Chang Kai-Shek cuando murió.
De camino al Grand Hotel Taipei, su guía turístico le dará una breve introducción cuando pase por el edificio de oficinas presidenciales, un edificio neorrenacentista construido en la década de 1910 durante la colonización japonesa, que anteriormente sirvió como oficina del gobernador general de Taiwán. Hoy en día, el edificio funciona como sede del poder político en Taiwán. Con una larga historia y una fachada icónica, también es un punto de referencia simbólico en la ciudad de Taipéi.
La siguiente parada de su recorrido es el Grand Hotel Taipei, un hotel histórico construido en la década de 1950, donde el gobierno organizó banquetes para muchos dignatarios extranjeros que visitaron Taipéi. El hotel cuenta con numerosas obras de arte y opulentas decoraciones, que incluyen paneles de pared ornamentados, pinturas, tallas, etc., que brindan lujosas experiencias gastronómicas y de alojamiento a los huéspedes. Aquí, su guía turístico lo ayudará a tomar una foto de grupo frente al majestuoso edificio de este extravagante hotel, capturando sus brillantes caras sonrientes.
Después de la parada para hacer fotos, el recorrido continúa con una visita al Santuario de los Mártires. El santuario fue construido en 1969, dedicado a los soldados caídos en guerras civiles y conflictos armados, para honrar su espíritu valiente. Cada año, en el Día de la Juventud y el Día de las Fuerzas Armadas, el presidente de Taiwán lleva a los funcionarios civiles y militares a rendir homenaje floral a los mártires.
La última parada de su recorrido es el mundialmente famoso Museo del Palacio Nacional, que también es uno de los museos más grandes del mundo. Con una colección de casi 700 000 piezas de artefactos y obras de arte antiguas chinas, el museo muestra 8000 años de historia del arte chino que abarca múltiples dinastías. Dos de las obras de arte más famosas que se exhiben son «la col de jadeíta» y «la piedra en forma de carne», que son visitas obligadas en el Museo del Palacio Nacional.
Al final de su recorrido de medio día, puede optar por desembarcar en la estación MRT Zhongxiao Xinsheng o en el distrito comercial de Ximending.