Mientras navega por el Malecón, el pintoresco paseo marítimo que se extiende a lo largo de la costa, sienta la refrescante brisa marina y disfrute de las impresionantes vistas del Océano Pacífico. Admire las instalaciones de arte y esculturas que bordean el Malecón, que muestran el lado artístico de Mazatlán.
A continuación, observa a los atrevidos buceadores de acantilados en acción mientras saltan sin miedo desde los impresionantes acantilados a las aguas azules de abajo. Maravíllate con su coraje y habilidad mientras interpretan esta tradición consagrada.
Continuando su viaje, llegará a la encantadora Plazuela Machado, una encantadora plaza rodeada de coloridos edificios coloniales. Sumérjase en el animado ambiente, con lugareños y visitantes mezclándose, músicos tocando y cafés que lo invitan a saborear las delicias locales.
Luego, diríjase a la majestuosa Catedral Basílica de Mazatlán, una impresionante joya arquitectónica que domina el horizonte. Explore los intrincados detalles de la catedral y conozca su rica historia y significado religioso.
Por último, ninguna visita a Mazatlán estaría completa sin una visita al bullicioso Mercado, donde podrá experimentar los sabores, colores y aromas auténticos de la vida local. Recorre los puestos repletos de productos frescos, artesanías hechas a mano y recuerdos tradicionales, e interactúa con amables comerciantes que te darán una cálida bienvenida