Según Amália Rodrigues, la gran cantante de fado, "El punto es sentir el Fado. Porque el Fado no se canta, sucede. No se puede explicar, solo se siente". Tener un encuentro con la cultura portuguesa, en contacto con valores culturales muy singulares - fado, instrumentos de cuerda tradicionales portugueses, vino - profundamente relacionados con la historia de Portugal. El concierto de una hora de duración comienza con la emotiva voz de nuestra cantante principal, seguida de los ricos sonidos de la guitarra portuguesa y la viola de fado (guitarra). En la pausa, se servirá un vino de Oporto reserva de una empresa familiar portuguesa del Valle del Duero. Un concierto de una hora que nos conduce a través de las intensas emociones del Fado.