El pueblo de Rojak y sus alrededores tienen muchos lugares para practicar senderismo y actividades al aire libre. Le ofrecemos un día con una caminata a los monasterios rocosos de Royak, donde vivían los tracios en el siglo V. En el siglo XIII, los monjes hesicastas utilizaron estas rocas como monasterios rupestres. Este es un lugar muy enérgico y misterioso, que esconde muchos secretos para los arqueólogos hasta ahora.
En un día haremos una caminata hasta estas misteriosas rocas, escalaremos y exploraremos cuevas muy difíciles de alcanzar donde vivía la gente, disfrutaremos de la vista desde la meseta y, al final de nuestro recorrido, aprenderemos nuevas técnicas de uso del equipo alpino para descender con seguridad a través de las rocas. La escalada es para principiantes, no es necesario tener experiencia en ella. Pero de todos modos utilizaremos todo el equipo necesario para evitar cualquier incidente.
Salimos de Varna a las 9 de la mañana en dirección a Dulgopol y más concretamente al pueblo de Royak. Llegaremos alrededor de las 10:00 de la mañana y tendremos que preparar todo el equipo necesario. Cuando estemos listos, nos dirigiremos al final del pueblo de Royak, desde donde tomaremos un camino de tierra que atraviesa el campo. Tras unos 40 minutos andando llegamos a una zona boscosa donde también hay un grifo. Este también es el lugar ideal donde nos detendremos para descansar y familiarizarnos con el inventario que manejaremos. Hacemos una sesión informativa, llenamos las botellas con agua y volvemos a ir a los monasterios rupestres.
Pasamos directamente por el bosque hasta llegar al pie del terreno rocoso. Hacemos un sistema de seguridad usando la cuerda para que sea seguro escalar y comenzamos a escalar rocas de 10 metros de altura para llegar a algunas de las cuevas. Todos estarán asegurados con una cuerda y no hay peligro de caerse. Exploramos la zona en detalle y subimos a la cima de la meseta, donde haremos un picnic y disfrutaremos de la vista. Reunimos nuevas fuerzas y nos dirigimos al punto de rappel. Decidiremos cuál será el mejor lugar para hacerlo. Vamos bajando uno por uno utilizando las técnicas recién adquiridas para hacerlo.
Cuando hayamos terminado y recargado las pilas con la energía de este lugar sagrado, nos aseguraremos de haber tomado suficientes fotografías hermosas, porque es hora de volver a Varna.
Un día lleno de emociones y conocimientos, esperamos volver a verte pronto para nuevas aventuras.