En el paisaje natural constituido por las coladas del volcán de San Martín de 1646 se encuentra inmersa esta casita invadida por el sol, a lo alto de una loma desde donde se puede ver el amanecer reflejado en el mar. Se accede a la casa a través de una pista que cruza por el Barranco de Mederos. Detrás de la casa podemos observar el Pico del Cabrito así como abundante pinar propio de esta zona volcánica. La situación de la casa alejada de la contaminación lumínica, hace de sus terrazas un buen punto para la observación del cielo y las estrellas. La casa está situada a unos 20 minutos del núcleo urbano del municipio de Villa de Mazo, donde se puede visitar el Museo Casa Roja, la Escuela Insular de Artesanía, así como el Mercadillo, donde se pueden comprar productos típicos de la zona.