Presente en casi todos los souvenirs y las guías turísticas de Tesalónica, la Torre Blanca de Tesalónica es el monumento más reconocido de la ciudad. La torre es famosa por su característica forma cilíndrica y las vistas panorámicas del puerto que pueden disfrutarse desde su nivel superior. La función de la torre ha cambiado decenas de veces a lo largo de los años y en la actualidad funciona como espacio de exhibiciones del Museo de la Cultura Bizantina.
La torre fue construida por el Imperio Otomano como una estructura de defensa para proteger el puerto de la ciudad. Más adelante fue usada como prisión hasta que la ciudad fue recuperada de los turcos a principios del siglo XX. Algunos dicen que un prisionero cubrió la torre de cal a cambio de su libertad, mientras que otros sostienen que fueron los griegos quienes la cubrieron de cal para simbolizar la purificación de la ciudad y la liberación del legado turco. La torre desempeñó un importante papel al defender la ciudad durante las dos Guerras Mundiales antes de ser transformada en museo en la década de los ochenta.
Antes de ingresar, tómate un momento para admirar su impresionante estructura. Con 33.9 metros (111 ft) de alto, la torre es usada como punto de referencia en toda la ciudad. El exterior de la torre ya no se cubre con cal regularmente, pero algunas franjas de color blanco descolorido todavía están visibles.
Ingresa a la torre para explorar el museo. Las exhibiciones están distribuidas en los seis pisos de la torre y conectadas por una serie de escaleras en espiral. Explora las muestras audiovisuales para aprender más sobre los 23 siglos de historia de la ciudad. Averigua sobre las exhibiciones temporales.
Asegúrate de subir por las escaleras zigzagueantes hasta la plataforma de observación de la torre. Las hermosas vistas de la ciudad y el puerto son una de las principales razones por las que tantas personas visitan esta emblemática torre.
El museo de la Torre Blanca de Tesalónica está abierto todos los días, todo el año. La entrada tiene un pequeño costo. Ten en cuenta que debido a la estructura histórica de la torre, el museo no cuenta con baños, aire acondicionado, cafetería ni elevadores.