El Teatro Romano de Volterra aún cuenta con muchos de sus elementos estructurales originales, por lo que ofrece una visión fascinante sobre el aspecto que tenían los teatros típicos en su época. Imagina que asistes a un evento de aquella época y obtén información sobre la manera en que funcionaba el teatro hace dos milenios. Los restos de los baños romanos que están atrás del teatro enriquecen la visión de cómo era la vida en Volterra en la antigüedad.
Observa este lugar de interés fundado por la familia Caecina, quienes vivieron en el siglo I a. C. bajo el reinado del emperador Augusto. Como lo sugiere un epígrafe descubierto en este sitio, el teatro se construyó como tributo a ese gobernante. Un arqueólogo de Volterra descubrió este sitio en 1950 y lo encontró en excelentes condiciones.
Explora el anfiteatro hundido para encontrar detalles típicos de los auditorios romanos. Ingresa al teatro por un túnel que emerge hacia el centro del estadio. Las gradas semicirculares de varios niveles se conocían como la "cavea" y tenían capacidad para 2,000 personas cuando el teatro estaba en su apogeo.
Obtén información sobre los logros técnicos y arquitectónicos del teatro antiguo. El "aulaeum" era un canal ubicado junto al escenario que servía para sostener el telón, mientras que el "porticus post" era un área de espera ubicada atrás del teatro, donde los asistentes se relajaban antes y después de las presentaciones. Contempla los restos que aún siguen en pie de la "scenae frons", una pared de mármol de dos niveles ubicada atrás del escenario.
En el mismo terreno que el teatro, puedes encontrar las ruinas de los baños construidos por los romanos. Recorre el perímetro de los baños al seguir los muros en ruinas. Todavía puedes ver el sitio donde se canalizaba el aire caliente en un sauna.
Aunque los camiones se detienen afuera del Teatro Romano, también puedes llegar caminando desde la Piazza dei Priori en menos de 10 minutos. Compra una tarjeta Tariffe Volterra para obtener acceso al teatro y a otras atracciones cercanas, como el Ecomuseo de Alabastro y el Museo Etrusco Guarnacci. El teatro está abierto todos los días de verano y durante los fines de semana de noviembre a marzo.