Mooloolaba es uno de los destinos más visitados de Sunshine Coast gracias a sus bellas playas familiares y a su estilo de vida cosmopolita. Disfruta un café junto al malecón Mooloolaba Esplanade y después explora las tiendas que hay junto al bulevar costero. Visita el parque marino Underwater World SEA LIFE Mooloolaba o participa en un recorrido de buceo por un barco hundido.
Mooloolaba fue erigido alrededor de la desembocadura del río Mooloolah. En la actualidad, su población ronda los 12,000 habitantes. Durante el verano, sus populares playas se llenan de familias, parejas y visitantes internacionales, quienes vienen aquí a disfrutar del sol.
Tres distintas playas se extienden en un tramo de 1 kilómetro (0.6 millas) y te ofrecen un oleaje tranquilo, pequeño o mediano. Hay salvavidas que vigilan las playas todos los días del año. Chapotea en las marismas o inscríbete a unas clases de surf. No olvides traer una sombrilla y bloqueador solar, ya que no hay lugares con sombra en la playa.
Disfruta un día de campo bajo los árboles que hay cerca de la playa. Aprovecha las instalaciones para parrilladas y las mesas para día de campo, o compra un clásico pescado con papas y saboréalo sentado en el pasto. Los vendedores mayoristas cerca de Point Cartwright, también llamado "The Spit", venden algunos de los mariscos más frescos del lugar. Prueba los famosos langostinos de Mooloolaba. El parque frente a Main Beach cuenta con una gran área de juegos para los niños.
Visita Mooloolaba Wharf (el muelle de Mooloolaba), a poca distancia a pie del malecón, donde encontrarás el parque marino de Underwater World SEA LIFE Mooloolaba. Alrededor de la marina hay restaurantes, tiendas y mercados. Toma uno de los tours de pesca o de las excursiones de buceo que salen de aquí con regularidad. Bucea al rededor del barco de guerra HMAS Brisbane, el cual fue hundido cerca de la costa para convertirlo en un arrecife artificial.
Mooloolaba se ubica a 100 kilómetros (62 millas) de Brisbane, a mitad de camino entre Caloundra y Coolum. Puedes trasladarte en coche o autobús. Hay estacionamientos de paga y estacionamiento gratuito en la calle, aunque los espacios se llenan rápidamente los fines de semana y durante las vacaciones escolares. Una vez en el lugar, puedes trasladarte con facilidad entre las playas y los restaurantes a pie. Hay paseos pavimentados junto al mar.