Esta villa frente al mar se encuentra en una tranquila playa de arena negra. Descubrirá una Martinica pacífica y auténtica, viviendo al ritmo del Sena (pesca tradicional), golpeando con amigos y puestas de sol.
Saldrás a explorar la ciudad histórica de Saint-Pierre, las playas desiertas de Anse Couleuvre o incluso las caminatas más hermosas de la isla, como la de Grand-Rivière / Prêcheur.