Chalet totalmente independiente a tan solo 150 metros de la playa. Cuenta con una parcela privada de 800 m² con piscina de 5x10 metros, amplio jardín y comedor exterior con barbacoa. WiFi de alta velocidad y aire acondicionado en dos dormitorios.
La vivienda es fresca en verano al disponer de ventanas en todas las fachadas y ventiladores en las principales estancias. Además, en invierno se puede hacer uso de la chimenea que hay en el salón y de radiadores portátiles.