Observa la impresionante belleza arquitectónica de la antigua Puerta de Almocábar. Este es uno de los elementos más impresionantes que quedan en pie de las murallas árabes de Ronda. La Puerta de Almocábar se construyó en el siglo XIII como el portal hacia la ciudadela de la ciudad. Su nombre proviene del término árabe al-maqabir, que es una referencia al cementerio que solía estar en la plaza que está frente a la puerta.
La puerta cuenta con una entrada en forma de herradura, flanqueada por dos torres semicirculares. Sube a la cima de las torres, camina por las murallas y disfruta la vista panorámica de la ciudad y la campiña de Andalucía. Piensa en la época en que las fortificaciones y el cañón del Tajo hacían de Ronda una ciudad casi impenetrable.
Junto a la entrada hay otro arco, conocido como la Puerta de Carlos V, el cual fue una adición de dicho rey en el siglo XVI. Observa el escudo de armas del antiguo rey Carlos V de España sobre el arco. Cerca de la puerta hay un canal de agua para los caballos.
Camina por uno de los portales para llegar a un patio silencioso. Siéntate en uno de los bares, pide unas tapas y disfruta la vista de la puerta. También puedes disfrutar la vista panorámica desde la Plaza Ruedo Alameda, que está frente a la Puerta de Almocábar.
Recorre la muralla hacia el norte para llegar al centro de la zona antigua de Ronda, conocida como La Ciudad. Detente en los puestos de observación, donde puedes ver el paisaje de las colinas verdes. Visita otros lugares de interés histórico, como la Puerta de la Cijara. Avanza hacia el Puente Viejo, donde puedes voltear hacia abajo para ver los acantilados escarpados del cañón del Tajo.
La Puerta de Almocábar está a unos 10 minutos a pie del Puente Nuevo y a unos 25 minutos a pie de la estación de trenes de Ronda. Puedes encontrar algunos lugares de estacionamiento en las calles que rodean la Plaza Ruedo Alameda. Visita otras atracciones ubicadas en la zona, como la Plaza Duquesa de Parcent, la Iglesia de Santa María la Mayor y el Palacio de Mondragón. Los baños árabes y el Museo Lara también se encuentran en los alrededores.