Valle del Tietar, un entorno natural donde descubrirás en la naturaleza los colores de cada estación y sus frutos, podrás disfrutar de románticos paseos, contemplar sus paisajes y deleitarte con sus noches estrelladas. Valle del Tietar, donde te recrearás en sus charcas naturales con aguas claras y cristalinas para poder gozar de un buen y saludable baño. Valle del Tietar, donde la gastronomía es otro motivo para ir y poder degustar.
Ubicadas en Piedralaves, "ven a perderte en sus antiguos barrios, sus pequeñas calles adoquinadas, sus casas de piedra, las más viejas han visto pasar más de 300 años de historia, contempla sus pequeños y humildes balcones de madera.
En un idílico paseo te encontrarás con la iglesia de finales del siglo XVIII de artesonado mudéjar, bóveda de cañón con arcos sajones y un impresionante retablo barroco.
Frente a la Iglesia, “la cruz de los enamorados”, según su basamento de 1681, llamada así por que antaño las parejas de novios quedaban junto a ella a la salida de misa.
Muy cerca, La Plaza, presidida, además de por el ayuntamiento, por la singular torre de piedra conocida como “La Torre del Reloj”.
Ya que estamos en la plaza si nos fijamos bien en alguna de sus salidas podemos ver las piedras que durante tiempo sirvieron para sostener los palos que cercaban la plaza, permitiendo, durante las fiestas, celebrar corridas de toros.
Más distantes están sus dos ermitas: La primera data del año 1500 y fue la iglesia primitiva, como parte del antiguo cementerio. Tenía un bonito porche románico y un atrio abierto formado por arcos apoyados en columnas de granito hoy desaparecidos. La segunda reconstruida en 1775, le da nombre el Patrón de la Villa “San Roque”, su primera edificación puede remontarse al siglo XIV