Ubicada en la orilla occidental del río Hudson de Nueva York, Newburgh es conocida por su escena artística activa y su diversidad cultural, lo que la hace muy popular entre los neoyorquinos.
Las orígenes de Newburgh tienen sus raíces en la historia de los Estados Unidos. Durante la Guerra de Independencia, George Washington estableció aquí su cuartel general. Hoy en día, puedes visitar las recámaras y presenciar reconstrucciones con vestuario de la época para aprender sobre este importante período de la historia de los Estados Unidos.
Descubre cómo lucía Newburgh en el siglo XIX, en la residencia del capitán David Crawford. Este sitio histórico alberga un museo y una galería de arte, y fue diseñado para mostrar cómo eran las casas de los poderosos capitanes marinos que vivieron en el valle del río Hudson a finales del siglo. Mientras recorres este edificio histórico, puedes admirar algunas de las pinturas de la Escuela del Río Hudson.
La ciudad también es un centro importante para las artes. Asiste a una presentación en la Gran orquesta sinfónica de Newburgh, un recinto que alberga a músicos de todo el mundo. Después de disfrutar de una función en este destino histórico, dirígete a la costa para visitar las tiendas o cenar. En las calles de la ciudad encontrarás diversos cafés, bares y restaurantes. Disfruta de las terrazas que ofrecen varios de ellos y admira la vista del río Hudson mientras comes.
Navega por el río en la tarde en un crucero de ruedas con paletas. Prueba una deliciosa cena a bordo o, si prefieres, disfruta del paseo por el río durante unas horas. Ambas opciones son ideales para contemplar el bello paisaje del valle del Hudson. Los barcos están anclados a lo largo del malecón, y hay estacionamiento público para facilitar el acceso.
Newburgh está a 107 kilómetros (65 mi) al norte de la ciudad de Nueva York. La estación del tren Amtrak está al otro lado del río, en la localidad de Beacon, lo que permite llegar a la ciudad con facilidad. Puedes llegar fácilmente a los aeropuertos internacionales JFK y LaGuardia, en tren o en auto.
Visita Newburgh durante el otoño para contemplar la caída de las hojas o planea tu visita para el verano, cuando el clima es más cálido. La cercanía de Newburgh con la ciudad de Nueva York se compensa por su ambiente relajado, lo que la hace ideal para una escapada romántica o para unas vacaciones familiares.