Descubre varios siglos de historia y contempla la opulencia de la Catedral de Fráncfort en el Museo de la Catedral (Dommuseum). Aquí puedes ver las exhibiciones de túnicas ceremoniales de los sagrados emperadores romanos, además de telas decorativas, joyas e instrumentos litúrgicos. El Museo de la Catedral se encuentra en el claustro del siglo XV de este edificio religioso. Después de visitar el museo, haz un tour guiado por la catedral para conocer cómo era la vida de los líderes antiguos más importantes de Europa.
Uno de los elementos más destacados del museo es la tumba del siglo VII de una joven que pertenecía a una familia de merovingios. Los arqueólogos descubrieron esta tumba durante las excavaciones realizadas en la década de 1990. Ellos encontraron una colección preciosa de oro, plata y joyas con gemas incrustadas, además de amuletos, juguetes antiguos y cerámica.
Observa el relicario de 900 años de antigüedad del cráneo de San Bartolomé, uno de los 12 apóstoles de Jesús, en la vecina Catedral de Fráncfort. Contempla el busto de plata de San Bartolomé creado por Franz Ignaz Berdolt y el depósito cubierto de cristal creado por el orfebre alemán Karl Borromäus Berthold. Observa también los instrumentos litúrgicos que datan del siglo XIV al siglo XX. Contempla los paramentos bellamente diseñados, que son las telas utilizadas para decorar altares, púlpitos y mesas de comunión.
Visita las exhibiciones de capas lujosas, coronas y túnicas medievales y barrocas. Muchos de estos elementos se usaban en las ceremonias de coronación de los gobernantes del Sagrado Imperio Romano, que se realizaban en esta catedral entre 1562 y 1792. Lee la gran historia de la catedral, que incluye su reconstrucción después de los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
Si tienes tiempo, participa en un tour gratuito por la Catedral de Fráncfort. Conoce el papel que desempeñó en el Sagrado Imperio Romano y las diferentes etapas de construcción del interior. Sube al mirador de la torre de la iglesia, que mide 66 metros (216 ft) de altura, para disfrutar la vista panorámica de la zona antigua de la ciudad.
Puedes caminar un poco hacia el Museo de la Catedral y la Catedral de Fráncfort desde la estación de Dom/Römer de la U-Bahn, o desde varias paradas del tranvía. El castillo está abierto todos los días y se cobra una cuota de entrada. La catedral también está abierta todos los días, y se cobra una cuota para subir a la torre.