La gruta Karangahake es conocida por su recorrido en el bosque. Puedes andar por los remanentes de bombas de minas de oro, túneles habitados por gusanos brillantes y viejas ferrovías en esta gruta excavada por el poder del río Ohinemuri. La caminata desde la entrada del parque sobre un puente suspendido hasta el fin en la estación Waikino es de unos siete kilómetros (4.5 millas). Los letreros del camino te irán dando la historia de la zona. Hay circuitos más cortos para caminar y puedes llegar en coche a las partes de la vía cercanas a la estación Waikino.
No te pierdas la caminata por la vías del túnel. El túnel de un kilómetro (media milla) cortado en la roca tiene ventanas, que en otros tiempos se usaban para arrojar desperdicios. Actualmente, te permiten admirar una vista espectacular sobre la gruta. Explora la estación de bombeo subterránea, donde hay restos de maquinaria para minería. Si buscas con cuidado, verás gusanos brillantes en el techo. Lleva una linterna para esta sección del recorrido.
A medio camino de Karangahake hacia Waikino, en lo profundo del bosque tropical de Nueva Zelanda, está la zona de las cascadas Owharoa. En Falls Retreat encontrarás opciones de hospedaje y cenas tipo bistró en un entorno forestal. Aprovecha tu estancia en la ciudad para conocer el Museo y Ferrovía Minera de Victoria Battery, y te darás una idea de qué tan grande era la operación de minería de oro. A inicios del siglo XX aquí se producía más de la mitad del oro de Nueva Zelanda. Da un tour por los túneles, mira dónde se horneaba y trituraba el cuarzo, o sube a un tranvía para explorar el área. La pasarela peatonal histórica de la gruta Karangahake también está abierta para ciclistas.
Hay algunas áreas que sirven de hospedaje, una bodega de vinos y un restaurante en Karangahake, apenas saliendo de la autopista estatal 2, cerca de donde inician las vías. Si te gustan los trenes, puedes dedicar un rato a subir a la ferrovía patrimonial en trenes antiguos desde la estación Waikino hasta Waihi.
Puedes llegar a la gruta Karangahake en coche o como parte de una visita guiada. Al llegar, explora la región en bicicleta, coche o a pie.