Jaisalmer se encuentra en el vasto desierto de Thar. El manto de arena que le da a la ciudad su tonalidad amarillenta le hizo valer el sobrenombre de Ciudad Dorada. Visita esta ciudad para contemplar los monumentales edificios y disfrutar de aventuras en las dunas de arena.
Al llegar a Jaisalmer, lo primero que verás es el Fuerte de Jaisalmer, una enorme estructura de piedra del siglo XII, ubicada en la cima de una colina. La gran fortaleza es una ciudad en miniatura, donde viven y trabajan varios miles de personas. Visita este gran complejo y echa un vistazo a las tiendas, las casas, los restaurantes, los templos y los palacios. Entre ellos, se encuentra el Templo de Jain, un grupo de siete templos interconectados. Se remontan a los siglos XII y XV y sus murallas cuentan con una gran cantidad de complejas figuras talladas de animales y personas.
Después de recorrer el fuerte, sube a un rickshaw para hacer el corto trayecto hasta Patwon Ki Havali. Este conjunto de cinco mansiones individuales, llamadas havalis, se construyó entre 1805 y 1860. Mientras paseas por la estructura de arenisca amarilla, presta atención a los pilares tallados, los ornamentados balcones y la gran colección de pinturas.
Podrás ver más fascinantes obras de la arquitectura en los templos de los alrededores del Lago Gadisar. El lago de agua de lluvia en las afueras de la ciudad es una de las atracciones más populares de Jaisalmer. Recorre los santuarios religiosos, navega en barco y pasea a orillas del lago. Visita la ciudad durante el invierno para ver las bandadas de aves migratorias.
Aprovecha que Jaisalmer se encuentra cerca del desierto y da un paseo en camello por las dunas. Muchos de los safaris comienzan en el pequeño pueblo de Khuri, ubicado a aproximadamente 50 kilómetros (31 mi) de distancia. Las excursiones duran desde algunas horas hasta varios días.
Para llegar a Jaisalmer, vuela al Aeropuerto de Jodhpur, ubicado a 274 kilómetros (170 mi) y, luego, maneja o toma un tren para completar el trayecto. Desplázate entre los grandes palacios y templos de la ciudad en bicicleta, en rickshaw motorizado, o bien renta un auto.