La iglesia de San Pedro es una estructura rayada fácil de reconocer que está ubicada sobre un promontorio rocoso que se extiende hacia el mar. Contempla el curioso exterior rayado e ingresa al interior para encontrar un ábside semicircular encantador.
La iglesia de estilo gótico que está en este sitio se consagró en el año 1198, aunque aquí han existido otras estructuras religiosas desde hace muchos siglos. Pasea por los alrededores, donde aún puedes ver varios muros y los restos de una iglesia paleocristiana del siglo V. Antes de eso, en este sitio había un templo romano dedicado a la diosa Venus.
La iglesia está ubicada en el borde de un acantilado, al final de un camino largo. Pasea por este sendero de adoquín y disfruta la vista del mar azul turquesa. El exterior de la iglesia se ve muy discreto desde lejos, así que debes acercarte para distinguir las peculiares franjas blancas y negras que decoran la fachada principal. Las franjas se agregaron para mostrar claramente cuál es la iglesia más reciente y cuáles son los restos de la iglesia anterior.
Antes de ingresar, observa el exterior de la torre, que cuenta con portales arqueados angostos a cada lado. Entra a la iglesia y observa en los muros interiores las mismas franjas que se ven en el exterior. Observa el ábside curveado y busca los ramos de flores. Los habitantes de la región suelen colocar estas flores en las mesas como ofrenda religiosa.
Regresa al exterior para disfrutar este espectacular mirador natural. Siéntate un rato a disfrutar el paisaje rocoso. Observa los barcos en el horizonte y las olas que rompen en las playas de la isla Palmaria.
La iglesia de San Pedro está abierta todos los días, aunque la entrada puede estar restringida los domingos y los días festivos religiosos. La entrada es gratuita.