La Gruta de Massabielle, también conocida como la Gruta de las Apariciones, recibe a unos 6 millones de peregrinos cada año. Visita un manantial que descubierto por un campesino adolescente en el siglo XIX después de una aparición de la Virgen María. Conoce las historias del agua que fluye aquí, la cual, según se dice, ha curado a un sinfín de visitantes desde su descubrimiento.
Conoce también la historia de Bernadette Soubirous, la niña de 14 años que se encontró con la aparición de una joven vestida de blanco que supuestamente era la madre de Jesús, quien le contó sobre la ubicación del manantial. Algún tiempo después, uno de los amigos de Bernadette curó su brazo paralizado en el manantial, con lo que se corrió la voz sobre este lugar milagroso.
Al llegar a Lourdes, dirígete al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes, que es el complejo de iglesias que rodean este lugar sagrado. Camina junto a las basílicas hasta llegar a un espacio abierto con bancas de madera ubicadas frente a la cueva.
Observa la fila de personas que esperan para ver el manantial. Muchos visitantes rozan los muros de la cueva con las manos mientras se acercan. Contempla la estatua de María que se eleva sobre los peregrinos mientras pasan junto al manantial sencillo que fluye por aquí. Varios papas, así como una gran cantidad de sacerdotes y peregrinos, han visitado el sitio de la aparición.
Sigue avanzando después de la gruta para ver los baños, donde los peregrinos enfermos pueden sumergirse en el agua del manantial. Muchos creen que esta agua aún tiene propiedades curativas muy poderosas. Hay varios asistentes voluntarios disponibles para ayudar a los visitantes a entrar al agua. También hay algunos grifos de agua del manantial frente a la gruta.
La Gruta de Massabielle se encuentra debajo de la Basílica de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, en el centro de peregrinación de la ciudad. Puedes llegar caminando hasta aquí desde la estación de tren ubicada en el norte de Lourdes en unos 20 minutos. La entrada es gratuita. Recuerda que muchas personas visitan este sitio como parte de una peregrinación religiosa, por lo que hay que actuar con respeto.