La Fortaleza de San Fernando es uno de los íconos más famosos de Honduras y la fortaleza española más grande en América Central. Ubicada en Omoa, en la costa norte, esta enorme estructura de piedra ha permanecido en el país prácticamente durante tres siglos.
En un principio, la fortaleza fue construida para proteger la costa de los piratas, quienes atacaban la región con barcos que cargaban plata con rumbo a España. Sin embargo, cuando terminó de construirse la fortaleza, los piratas ya no eran una amenaza. La Fortaleza de San Fernando, en la actualidad, consta de dos fuertes ubicados muy cerca el uno del otro. Fueron construidos por los españoles entre 1752 y 1775. Hoy día, podrás ver ambas estructuras con un estado de preservación distinto.
Tras la independencia de Honduras, que tuvo lugar en 1821, el gobierno local tomó la fortaleza. Fue utilizada como prisión hasta 1959. En la actualidad, es administrada por el Instituto Hondureño de Antropología e Historia, y se trata de un monumento nacional abierto al público.
Recorre la fortaleza y los terrenos circundantes, que cubren 4400 metros cuadrados (5262 yardas cuadradas). Al ingresar en la fortaleza, observa el Escudo Real de España, muy bien conservado. Camina más allá de los jardines, con su tonalidad verde, y los muros solemnes de piedra, e imagina cómo sería el tiempo en que los piratas atacaban el Caribe. Los muros de la fortaleza están hechos a base de coral y piedra caliza, y son muy atractivos.
Obtén más información sobre la historia de la fortaleza y la ciudad de Omoa en el museo que se encuentra en el establecimiento. Aquí, podrás leer información acerca del pasado de la región o tomar una visita guiada. Descubre la historia de los esfuerzos de colonización de Colón en Honduras y las consecuentes rutas transatlánticas que dieron forma al país. Observa las espadas y los cañones que se utilizaban para defender a la fortaleza en la sala de artillería.
La Fortaleza de San Fernando está abierta todos los días. Hay que pagar una pequeña cuota para ingresar a la fortaleza y al museo. Puedes llegar fácilmente a pie a las tiendas, restaurantes y hoteles de Omoa desde la fortaleza. Varias playas y otras ciudades costeras se encuentran a una distancia cercana en coche.