Aún si no te gusta el whiskey, probablemente reconozcas la botella "verde Irlanda" del whiskey Jameson con la leyenda "Sine Metu" en el clásico escudo. Significa "Sin Miedo" y fue el lema en latín de la familia Jameson. En la antigua destilería Jameson escucharás historias sobre su legado y serás testigo del proceso para elaborar el whiskey más famoso de Irlanda.
Irónicamente, el creador del whiskey más exportado de irlanda, John Jameson, en realidad era escocés. Una explicación simplificada de la calidad superior de este whiskey es que este licor, en Estados Unidos se destila una vez en Escocia, lo destilan dos veces, pero el whiskey Jameson se destila tres veces. Se deja añejar en barriles de roble hasta que se forma ese distintivo gusto a vainilla. John Jameson padre estableció la destilería en 1780 y con el tiempo, su hijo quedó a cargo. Hoy en día, el whiskey Jameson se destila en Cork, pero se envasa en Dublín.
El museo ocupa el espacio donde en otros tiempos se ubicaba la antigua Destilería Jameson. Puedes unirte a una visita guiada cada 25 minutos. Empieza por una breve presentación audiovisual acerca de la historia de la destilería. Después entrarás a una réplica de la antigua destilería. Conocerás el proceso exclusivo de triple destilación en este recinto, que guarda barriles de roble a lo largo de las paredes y un colosal equipo de calentamiento. Observa cómo el líquido se transforma de una simple mezcla de agua, cebada y levadura en un whiskey con un suave tono dorado.
Después del recorrido, los visitantes suelen recibir un vaso y un agitador cortesía de la casa en el Jameson Discovery Bar. Levanta la mano cuando pidan a tres voluntarios para degustar y comparar tres whiskies, ¡así probarás tres bebidas gratis! La segunda prueba es comparar el whiskey Jameson con el Jack Daniels y el Johnny Walker. ¡Trata de llegar sobrio para que no te engañen!
La antigua destilería Jameson está abierta todos los días. Toma el camión hacia Arran Quay o el tren urbano Luas Tram hacia la parada Smithfield. De ahí, llegas caminando en pocos minutos. El autobús turístico Hop-on, Hop-off también hace parada en esta atracción. Hay una tienda de regalos y un restaurante donde puedes comer algo. De abril a octubre, reserva una mesa en el Irish Shindig Nights, vale la pena que veas el espectáculo y pruebes la comida... y claro, un vaso de whiskey.