Disfruta un buen chapuzón, nada con snorkel y bucea en el ambiente fresco subterráneo de la Cueva Saturno. Esta caverna llena de estalactitas y estalagmitas está inundada con agua transparente que llega a una profundidad de 20 metros (65 ft) en algunos lugares.
Baja los escalones para llegar a la boca de la cueva. Antes de entrar al agua deberás enjuagarte en la regadera. Utiliza las instalaciones disponibles en este sitio. Puedes rentar equipo de snorkel en la cueva. Si quieres bucear en el sistema de cuevas, reserva un tour con una de las empresas locales.
Cuando estés en el interior de este espacio cavernoso, contempla la belleza de las estructuras rocosas retorcidas que parecen gotear desde el techo. Esta escena se hace aún más impresionante al ver los reflejos en el agua.
Entra a la piscina de agua dulce desde una de las plataformas. A muchas de las personas que vienen a nadar les gusta flotar boca arriba para contemplar las formaciones geológicas. Al explorar el ambiente subacuático de las profundidades de la cueva, puedes ver barracudas, langostas, camarones ciegos, peces ángel y otros tipos de vida acuática. Observa las bellas formaciones rocosas submarinas.
Viaja en auto o toma un taxi hacia esta maravilla geológica que se encuentra a unos 35 kilómetros (22 mi) al oeste de Varadero y a unos 15 kilómetros (9 mi) al este de Matanzas.
La cueva está abierta todos los días y se cobra una cuota de entrada. Aunque es un destino turístico muy popular, puedes evitar a las grandes multitudes si visitas este lugar temprano en la mañana o en las últimas horas de la tarde. Después de explorar la cueva, compra un refrigerio en el bar botanero ubicado cerca de los escalones que conducen a la gruta inundada.
Si te gusta el mundo subterráneo de la Cueva Saturno, visita también las Cuevas de Bellamar en Matanzas. Estas cuevas han estado abiertas desde la década de 1860 y se dice que son las cuevas más largas y profundas de Cuba.