Magnífica vista al mar, tranquilidad garantizada, muchas actividades y descubrimientos cercanos
Alquiler de 2 villas independientes a 10 metros entre sí en una propiedad privada de más de una hectárea. Ideal para vacaciones en familia o amigos manteniendo su privacidad.
Las dos villas son idénticas y están a solo unos metros de distancia.
Cada villa consta de:
57m²
2 habitaciones con aire acondicionado
Una gran terraza con vista al mar protegida (muebles de jardín con tumbonas + barbacoa)
Parking privado para 4 plazas.
Área de cocina equipada (placa eléctrica, horno, frigorífico, microondas, lavavajillas, lavadora).
Sala de estar con sofá cama
Sala de estar con televisión vía satélite
ducha
WC separado
Vista al mar, ubicada a 500 metros de la playa de arena llena de muchas actividades náuticas tanto para niños como para adultos, respetando la tranquilidad y el lugar de otros visitantes de verano.
Todo el confort moderno y funcional.
Maravillosamente integrado en la naturaleza circundante, rodeado de un jardín floreado en perfecta armonía con el matorral compuesto de madroños, mirto (myrta) que le ofrece todos los aromas de Córcega.
Una gran terraza sombreada con vista al mar le permite relajarse mientras admira los veleros que anclan en la bahía o que pasan por la costa ...
Cerca, también las piscinas naturales de agua dulce Cavu para todas las actividades fluviales, cuando desee descansar de la playa. Excursiones marítimas (mini cruceros: islas Lavezzi, Cavallo ...), y en las montañas: agujas de Bavella, caminatas en la meseta de Cuscionu ...
Tiendas, restaurantes cercanos.
Entre Porto Vecchio y Solenzara, a 7 minutos de Sainte Lucie de Porto Vecchio y el Golfo de Pinarello (salida de mini cruceros a las islas Lavezzi), a 8 minutos de Solenzara (salida de los cañones de Bavella: pueblo típico, famoso por sus agujas y su cordillera en la ruta del GR 20), a 10 minutos de las magníficas piscinas naturales de Cavu).
A 20 minutos de Porto Vecchio: un verdadero paraíso lleno de múltiples actividades.
ya 40 minutos de Bonifacio, su puerto y sus magníficos acantilados de piedra caliza, sin olvidar el legendario golf de Sperone (18 hoyos). Desde allí, incluso puedes ir a Cerdeña, con o sin coche, para pasar un día allí.