El Campo de exterminio Choeung Ek conmemora un trágico pero importante momento en la historia de Camboya. Entre 1975 y 1978, cientos de camboyanos inocentes fueron detenidos, torturados y asesinados en manos del régimen de los Jemeres Rojos. De las casi 17,000 víctimas que atravesaron las puertas del lugar, se cree que solo sobrevivieron siete.
En 1980, los restos de casi 9,000 víctimas fueron exhumados en el terreno de esta antigua huerta. De las 129 tumbas comunales que se descubrieron, 43 permanecen intactas.
Una visita el Campo de exterminio Choeung Ek te dará que pensar, dados los horrores que se presenciaron en este lugar. Sin embargo, fue transformado de manera respetuosa en un sitio pacífico que rinde homenaje a todas las víctimas. Recuerda a quienes perdieron su vida en la Estupa Memorial. Aquí podrás ver los cráneos de cientos de víctimas detrás de paneles de vidrio. Los cráneos están clasificados por edad y sexo.
Dentro del museo, una serie de exhibiciones te enseñarán sobre la historia de los Jemeres Rojos. El régimen mantenía escalofriantes registros muy completos sobre sus prisioneros, con fotografías incluidas. Muchas de estas imágenes están en exhibición y muestran los rostros de las víctimas de los crímenes que se cometieron aquí.
Para entrar al Campo de exterminio Choeung Ek y al museo, hay que pagar una cuota de entrada que incluye una audioguía disponible en varios idiomas. Escucha las historias de los sobrevivientes del régimen de los Jemeres Rojos junto con un espeluznante relato de uno de los verdugos de Choeung Ek.
Puedes llegar fácilmente al Campo de exterminio desde Phnom Penh. Está ubicado a aproximadamente 15 kilómetros (9 mi) al sur de la ciudad. El precio de los taxis desde el centro de la ciudad es muy razonable. El sitio cuenta con carteles en inglés.
El Campo de exterminio Choeung Ek está abierto todos los días. Visita el lugar el 9 de mayo, cuando se realiza un homenaje para conmemorar a las víctimas. Sin importar la fecha de tu visita, este lugar te hará reflexionar sobre los horrores que los poderes malignos cometieron contra la humanidad.