Dirígete al Cenote X-Batún en un día caluroso y disfruta un chapuzón en esta impresionante alberca natural. Aquí puedes pasear en bicicleta, descansar o hacer un picnic. Este es un lugar de fácil acceso donde puedes pasar un rato agradable en la naturaleza.
Comienza el día viajando en auto alrededor de una hora desde Mérida para llegar al pequeño pueblo de San Antonio Mulix. Este municipio tiene el mismo nombre de una hacienda en ruinas que se está desmoronando lentamente bajo el sol tropical. Detente en la cabaña señalizada para pagar la entrada al cenote.
Para hacer algo de ejercicio, renta una bicicleta y recorre el camino de tierra de 5 kilómetros (3 mi) hasta el cenote. Si el clima está demasiado caliente y bochornoso, también puedes conducir tu auto hasta aquí. Si viajas con niños o si tienes problemas para nadar, puedes rentar un chaleco salvavidas.
Ponte tu traje de baño al llegar a este sitio. El agua tiene un color asombroso. Querrás pasar todo el tiempo buceando con snorkel para ver a los pequeños peces que nadan entre las raíces colgantes del árbol. Los habitantes de la región piden que te enjuagues el repelente de insectos y el protector solar en las regaderas antes de nadar. Esto ayuda a proteger a los animales que viven en el agua.
Si tienes tiempo, visita el Cenote Dzombakal antes de que termine el día. Este sitio forma parte del mismo complejo, tiene un ambiente similar a una cueva debido a la roca que cuelga sobre el agua y también está incluido en la cuota de entrada.
Disfruta los platillos tradicionales yucatecos y toma un jugo fresco en el restaurante que está cerca de la entrada. Relájate en tu mesa y escucha el canto de los pájaros desde la selva.
Visita este sitio entre semana para evitar las multitudes de fin de semana. Consulta con anticipación el horario de apertura de los cenotes. Si te quieres quedar más tiempo, puedes acampar u hospedarte en una de las cabañas de la zona.
Haz un viaje al Cenote X-Batún para vivir momentos inolvidables.